
‘La invención del maíz por los mexicanos sólo es comparable a la invención del fuego por parte del hombre’. (Octavio Paz)
24 marzo 2025
Federico Nogueda Berdeja
Para la presidenta de México Claudia Sheinbaum la prohibición de la siembra del maíz transgénico o modificable, va más allá, de una relación bilateral y comercial, si no, tiene que ver con algo más profundo la identidad nacional del maíz con el mexicano.
Para los diarios norteamericanos en el tema de la prohibición de la siembra de la semilla del maíz Transgénico, es asombroso, ellos lo han investigado antropológicamente, les ha admirado como el fenómeno del maíz criollo, prácticamente está enraizado con la planta y el mexicano.
Y sobre todo esa expresión, que la misma presidenta Sheinbaum la pronunció cuando firmó el decreto de su prohibición: ‘Sin maíz no hay país’.
‘Tenemos que protegerlo por la biodiversidad, pero también culturalmente, porque el maíz es lo que nos vincula intrínsecamente con nuestros orígenes, con la resistencia de los pueblos indígenas’.
Claudia Sheinbaum firmó decreto presidencial para prohibir el maíz transgénico o manipulable, Se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la reforma impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum, que prohíbe el cultivo del maíz transgénico y protege las variedades nativas del grano originario en México.
Pero los agricultores de maíz modificable en EU, se molestaron con el gobierno mexicano, ya que argumentaron que nunca han podido comprobarles, que el maíz transgénico es perjudicial para la salud.
Ya que cada año EU estaba vendiendo a nuestro país cerca de de 5 mil millones de dólares en maíz transgénico, diseñado para resistir plagas y tolerar herbicidas. La mayor parte de ese maíz se utiliza para alimentar al ganado.
En esa misma expresión, la investigadora en genética molecular de la Universidad Autónoma de México (UNAM), María Elena Álvarez-Buylla, mencionó que, el maíz modificado de EU, es menos nutritivo, que el mexicano y está vinculado a enfermedades hepáticas y otros problemas.
Además, que a la mayoría de mexicanos no les gusta por ese sabor especial que sienten en su paladar a la hora de comerlo.
De acuerdo con la presidenta Sheinbaum, la medida al decreto pretende proteger los cientos de variedades de maíz criollo mexicano, sobre todo para algunos el maíz morado.
El alimento básico de los mexicanos, tras el decreto presidencial parece que se volvió como un grito de guerra, y como dice la investigadora de la UNAM, está en la raíz de nuestra cultura, a los mexicanos les da fuerza e identidad.